CRÓNICA DE LA MARATÓN DE VALENCIA 2018
2 de diciembre del 2018
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Este año 2018 ha sido muy difícil sacar adelante una regularidad en los entrenos. Pero, a pesar de eso, he competido en dos grandes pruebas: el 65 km de montaña del Trail del Peñalara (mi primera incursión en larga distancia en Trail de montaña) y mi participación en el maratón de Valencia, ya un clásico en mi planificación.
¡Qué duro es volver a coger ritmos!. Para agosto retomé la bici, llevaba sin tocarla desde septiembre del 2017, después del infierno del Ironman Madrid. Me puse un poco a tono para poder afrontar las salidas con mi primo y el tío Jaime, pero iban demasiado fuertes... ¡Estos jóvenes! Y puse la mirada en el maratón de Valencia. Quedaban casi cuatro meses.
Era la primera vez que afrontaba Valencia sin haber pasado antes por un Ironman. Tenía la esperanza de acercarme a mi tiempo récord de 03:04:45. Pero fue duro volver a ponerse la zapas y retomar ritmos.
La idea era llegar al plan de entreno de 3 meses lo mejor preparado posible. Tenía mucho camino de base por hacer. Entre otras cosas, bajar de peso. Siempre se lo digo a Marta: - No es lo mismo correr con un saco de patatas de 5kg durante toda la carrera, que hacerlo sin ella - Vinieron las series, las tiradas largas, los dolores,…. No terminaban de salir los ritmos. En un momento concreto, como a mitad del plan, hubo una mejora sustancial, que por un tiempo me hizo soñar con que iban a salir bien las cosas, pero fue solo un espejismo. Luego temas personales, laborales, sociales, … me recordaron que soy un runner de grupo de edad y se quedaron las tiradas largas en el tintero.
Llegó el fin de semana del día D. Toda la familia volcada. Se vinieron todos a empujar. Arroz meloso de setas y gambas para celebrar este evento deportivo-familiar en casa Baina. Descanso en casa. Preparación del material y listos para la batalla.
Mis previsiones, eran hacer una maratón entre 03:09:00, siendo muy optimista, y 03:30:00 si se me iba mucho. Era consciente de mis limitaciones y sabía que iría bien hasta km 25-30 y luego a sobrevivir.
Salida espectacular, una temperatura durante toda la carrera fantástica. Los puntos de avituallamiento muy bien preparados. Animación en casi todos los kilómetros de la prueba.
Y dicho y hecho, en el km30 me vino el muro. Tenía que comenzar a regular mi zancada para poder llegar a meta y que no se me fuera mucho el ritmo. Y lo conseguí. Disfruté de los últimos 195 m. Como un enano, saludando a todos. Una vez más tenía la suerte de disfrutar de ese momento. Al final 03:22:53. Una entrada muy emotiva.
Haciendo balance siempre digo que es muy importante incorporar al menos dos sesiones de gym como prevención de lesiones y fortalecimiento. Este año todo fue entrenamiento funcional, y me ha ido muy bien para el tren superior, pero no he encontrado los ejercicios suficientes para fortalecer las patas. Volveré al gym de pesas, al menos para el tren inferior. Lo acusé bastante en carrera. Y seguiré intentando cuidar la alimentación para que vaya todo en consonancia.
No puedo dejar de las gracias a mi hermano Dani, mi madre y Martita que estuvieron todo el fin de semana siguiendo, ahora aquí, ahora allí,… Mil gracias, fueron unos días muy chulos. Gracias por acompañarme en estos momentos.
Ahora que ya me he puesto en orden, voy a continuar. Ya he retomado el entreno. El Plan Off ya está en marcha y por delante un 10k en familia, una media maratón, un medio Ironman y un Ironman.
Muchas gracias por leerme.
Y un abrazo,
Álex Santiago
Una maratón muy dura. Ya desde los primeros metros, la libre de las tres horas se le escapó el globo. Parecía una metáfora de lo que me iba a suceder.
